Pasan las décadas, dejamos a atrás generaciones y, sin embargo, los espacios dentro de una casa cumplen las mismas consignas. Y más durante estos duros tiempos de confinamiento. La cocina como espacio social se establece más que nunca como una de las estancias más importantes y cálidas de la casa. Por ello, diseñadores e interioristas hacen prevalecer en estos tiempos ese valor como concepto imprescindible a la hora de realizar sus configuraciones.

Desde el principio de los tiempos, la humanidad ha conservado algunos rituales sociales. Uno de los más importantes es el de reunirse a la hora de alimentarse. En la edad contemporánea, ese rito ha permanecido y se ha expandido también a la hora de la preparación de la comida. Se podría decir que se ha transformado, incluso, hacia una celebración. Un momento de reunión, de comunión y de alegría dentro de cada día. Juntarte con los tuyos y utilizar la cocina como un espacio social. Por ello, hoy más que nunca, se trabaja desde el diseño para potenciar esa función.

ADECUACIÓN DEL ESPACIO

Dentro de los distintos servicios antes mencionados que desempeña una cocina, cabe señalar lo importante que resulta componer y aprovechar bien el espacio de la sala en la cual se configurará. Por ello, las últimas tendencias y estilos saben perfectamente cómo separar las áreas de cocción y de reunión. De este modo, se facilita el uso de la cocina para desempeñar cada una de estas funciones por separado.

INTERÉS POR LOS COMEDORES INTEGRADOS

En este punto, los planteamientos de las últimas temporadas han dado rienda suelta a incentivar la cocina como espacio social. ¿Cómo? Haciendo que vuelva a ser el lugar donde comemos en familia. Por ello, elementos como las mesas situadas en el centro de la estancia o diversos muebles como las encimeras americanas están a la orden del día.

En definitiva, la cocina como espacio social es un concepto que no varía. Una de las salas más personales y fraternales que existen dentro de un hogar debe tratarse como tal a la hora de su diseño. Esa calidez y ese perfil de armonía y de recompensa no deben perderse jamás. Por ello, y aún más en estos tiempos tan difíciles, es conveniente cuidar esta serie de principios dentro del interiorismo.